Somos los Dioses que un día tuvieron el sueño de vivir una vida humana. Lo imaginaron y así lo crearon. Y durante tantas vidas cosecharon la experiencia terrenal; los apegos, las limitaciones, la separación... Hasta que un día, distraidos por la fascinación de sus manifestaciones olvidaron quienes eran... Olvidaron su divinidad... Olvidaron cómo se regresaba a la fuente de la que provenían... ¡Hasta ahora!